Oh, cuán precioso es adorar

Oh, cuán precioso es adorar a Jesucristo,
Y meditar en la palabra del Señor;
Esperando con paciencia su venida,
 Para nuestra eternal consolación.
CORO 
//Y lo más precioso es volar al cielo
Llegar con Cristo y rendirle honor//
Oh, cuán preciosa es la reunión de los hermanos
Que se bautizan en el Nombre de Jesús;
Esperando la promesa de su Padre,
Que por Cristo nos tendría que mandar.
En aquél día en que resplandezca la justicia,
Todos saldremos a ordenanza del Señor;
Saltando como becerros de manada,
 Dando glorias y aleluyas al Señor.
Mirad aquellas multitudes que están blancas,
¿Quienes serán?, vienen con palmas en sus manos;
Estos pasaron muy grandes tribulaciones,
Y la sangre del Cordero los limpió.